Buenas noches, profesora.
Como usted comenta, coincido que una de las dificultades es la relación directa que teníamos con los alumnos en el salón de clases. Puesto poco a poco los conocemos e identificamos su comportamiento, que en muchas ocasiones son los que dan la pauta de saber si realmente comprendieron lo visto en clase o requiere otra estrategia para reforzarlo, porque además de la limitación verbal que usted indica, algunos jóvenes son en exceso reservados y prefieren quedarse con la duda antes de preguntarlo; nos hace falta ese agente social.